Hoy tenemos el placer de presentaros un proyecto que hemos puesto en marcha en Madrid y en Barcelona en colaboración con Las Zonas Azules: DeMemoria.
DeMemoria nace para llamar la atención sobre lo que ocurre con los negocios tradicionales, los locales de los artesanos o los pequeños comercios locales, que representan el patrimonio cultural de nuestras ciudades y que de alguna manera están en peligro de extinción, o bien por el precio de la renta urbana o bien por falta de relevo generacional.
Con DeMemoria queremos apoyar a los locales de interés histórico-cultural y a los talleres artesanales, darles visibilidad, y fomentar a que se respeten y se aprecien las tradiciones. ¡Si luego conseguimos el relevo generacional hemos ganado la lotería!
Para ello estamos haciendo un extenso trabajo de campo, tanto para conocer la situación de los locales productivos, en Madrid y Barcelona, como para dar a conocer la iniciativa y establecer colaboraciones.
Os comparto lo que se espera del proyecto, los beneficios para los comercios y los resultados a los que aspiramos. Por último una pequeña historia que pasó justo antes de empezar con DeMemoria, y relacionada con esta iniciativa.
Lo que pronto vais a ver y lo que proponemos:
– Realizar actividades en formato taller o charla en los locales y talleres identificados
Actividad dirigida a los ciudadanos y especialmente a las familias con niños, para sensibilizar a los más pequeños sobre el valor de las tradiciones y la importancia que un oficio como éstos tiene.
– Realizar mini-clips en formato charla-entrevista en la que propondremos algunas preguntas con el objetivo de registrar la historia del local o de la calle y sobre todo el devenir de los oficios y comercios centenarios.
Cuáles son los beneficios para los comercios:
- Mayor visibilidad
- Mayor presencia en las redes sociales
- Nuevos clientes que no conocían el negocio
- Puesta en valor del trabajo y las tradiciones
- Trabajo en red colaborando con asociaciones de artesanos y otras entidades de apoyo
Qué resultados esperamos:
- Mapa interactivo online para la participación de la ciudadanía y la visibilización de los comercios
- Planificación de actividades en varios locales históricos para la interacción y el intercambio intergeneracional
- Fomento de la transmisión de las tradiciones y apoyo de la red productiva local
- Relevo generacional
La historia: Juan y la Mantequería San Francisco.
Esta es una historia corta y con final en cierre, pero quizás la próxima sea diferente y para esto también estamos!
Llego a la Mantequería de la calle Bailén y pido una manzana y un plátano. Podía haber pedido algo más exótico pero realmente tengo hambre, son las 17.00 de la tarde y he comido bien, así que decido cuidarme. Me encantan las tiendas de barrio, la atención personalizada y las sonrisas autenticas, de aquellas que hacen que haya un intercambio de energía. Estoy en el sitio correcto.
Veo que tienen todo tipo de productos de alimentación, como bacalao en salazón, quesos curados y jamones colgando, como cualquier otra tienda de barrio, pero ésta tiene algo especial. Durante la espera veo que las personas acuden especialmente para el bacalao y casi me animo a aprender a cocinarlo, así que pregunto a la señora que tengo delante en la cola cómo se cocina el bacalo en salazón. Me da una serie de posibilidades y sobre todo me recuerda que hay que dejar el bacalao en agua durante muchas horas para que se restablezca la cuantia normal de sal.
El dueño de la tienda atiende paciente. Es un señor mayor, pero no tan mayor la verdad. Tiene cara simpática y la experiencia se le nota en los ojos. Las herramientas son las de toda la vida, una báscula antigua, una sierra para cortar el bacalao de madera, unas estanterías sencillas y una sonrisa en la cara, nada más y nada menos! Qué alegría, me digo, he encontrado un sitio donde ir a por fruta en la pausa del trabajo y así alimentar mis neuronas para el resto de la tarde.
Una decepción cuando, el día siguiente, Juan me dijo que cerraban en tres días.
Por jubilación.
Porque los hijos no quieren hacerse cargo del local y los dueños, Juan y su mujer, ya están cansados y quieren dejar de trabajar.
En este caso no hay nada que tenga que ver con la rentabilidad del negocio, ni ningún problema en el alquiler, por la finalización de los alquileres de renta antigua. La razón es la más común del mundo: “Me quiero jubilar porque ya es hora y mis hijos tienen otros trabajos y otras vidas y no se quieren dedicar a la tienda.”
La Mantequería de San Francisco cerró cuatro días después que la conocí, y casi no me dio tiempo de conocer la historia que seguramente hubiera sido larga.
Aún así la amabilidad de Juan me permitió entretenerme unas tardes con él y tener acceso a las fotos que os comparto. La fachada de la tienda es preciosa y merece la pena ser conservada, esperemos que los dueños se hagan cargo de que los futuros arrendatarios la mantengan.
Estas son las fotos de Juan y su mujer, unos pocos días antes de que la tienda se cerrara. Compartidas con grande amabilidad de Juan que me las dejó para que me hiciera unas copias y elaboradas por una fotógrafa profesional Olga Guarddón.
¡Muchas gracias Juan!
Si en el recorrido de tu casa al trabajo ves algún taller o local que te encante o tienes a tu tienda favorita del barrio, ¡contáctanos!
Haznos llegar la información del comercio, para que nos pongamos en contacto con las personas que lo llevan y podamos mejorar el proyecto y crear comunidad.
2 comentarios
Asencio Medias, Goya, 85 , 28001 , MADRID
No concibo la calle Goya sin esta tienda. No sé si va hacia la desaparición o no, pero si las medias que buscas, no están ahí… seguramente, no existen.
Un mostrador “de los de antes” y atrás los anaqueles de madera, repletos de cajas en perfectísimo orden… ¡una maravilla!
Es de esos lugares que cuentan con “asesoría profesional”, con una paciencia infinita (muy estimable cuando no sabes muy bien lo que quieres) y con una vocación de servicio maravillosa.
Atienden por igual a quien llega con el “estoy buscando algo como…” que a quien tiene tan detallada su necesidad que parece que está pidiendo un café con leche (unas negras, 60, talla XX)
La vitrina, llena de piernas enfundadas en medias, sin más historias… adoro esta “mediería”
Fantástico Malena. Muchas gracias. ¡Vamos a ver esta tienda ya! ¡Qué alegría! Espero poder darte noticias pronto y a ver si somos capaces de organizar algo con ellos! Feliz día y gracias por compartir ideas y sitios!